El jugador del Real Madrid (ese equipo de fútbol que quiere construir un Real Madrid Resort Island en el archiconocido emirato árabe de Ras al-Jaima.) Iker Casillas refregó un moco, que acababa de sacar de su nariz, en la cara de un pobre niño de 5 años. La próxima vez que se lo meta en el chocho de la Carbonera…